¡Me quema el estómago! ¿Alguien tiene un antiácido? La ulcera es una enfermedad demasiado habitual que padecen los seres humanos en la actualidad -en especial si vivís en la Argentina-. Muchas son las causas que la provocan pero por suerte los síntomas son muy claros y es diagnosticable rápidamente. Y el tratamiento es bastante sencillo. «Largando el café, el alcohol, el cigarrillo, a comer sanito y listo…
DESCRIPCIÓN:
Es una lesión en la capa de revestimiento del estómago o duodeno causada por los jugos gástricos o duodenales. La denominación de úlcera péptica responde a las sustancias que originan las lesiones: una combinación de sustancias ácidas y pepsina, que es una enzima que escinde las proteínas. Según su localización, las úlceras pueden ser gástricas, duodenales, esofágicas. Según la circunstancia, puede haber úlceras por estrés, por enfermedad o lesión.
CAUSAS:
En condiciones normales, las mucosas del estómago y del duodeno se protegen de los jugos que contienen con una capa de mucosidad. Cuando se altera este equilibrio, las paredes de los órganos son afectadas. Varias razones pueden causar este desequilibrio, por ejemplo, las infecciones: bacterias, fármacos erosivos (como la aspirina), antiinflamatorios no esteroides y por estrés emocional. Influyen también características estructurales de los individuos, ya que no todos secretan la misma cantidad de ácidos: se puede clasificar a las personas en secretores bajos, intermedios y altos. Estos últimos tienen mayor tendencia a generar úlceras pépticas.
SÍNTOMAS:
Puede haber dolor definido en la parte abdominal, sensación de vacío, quemazón, hambre e hinchazón gástrica, lo que causa que el alimento no pase correctamente, provocando náuseas y vómitos. Si es una úlcera esofágica, puede haber dolor al tragar. El dolor que causan las úlceras duodenales es mayor cuando el estómago está vacío. En las úlceras gástricas, en cambio, comer puede intensificar el dolor. Cuando las úlceras se perforan la situación se agrava, y esto ocurre cuando la zona erosionada se va profundizando hasta atravesar la pared y abrirse al espacio abdominal.
DIAGNÓSTICO:
Mediante revisión médica del paciente que presenta el dolor característico. Se puede hacer una endoscopia (procedimiento que permite visualizar el interior del estómago o del duodeno mediante un tubo flexible y también obtener muestras de tejido para realizar una biopsia); análisis de sangre (para comprobar si hay anemia por una úlcera sangrante); estudios del jugo gástrico (para determinar la cantidad de ácido) y radiografías con bario, (por si la endoscopia no detecta ninguna úlcera).
TRATAMIENTO:
Primero se disminuye la acidez y se suprime cualquier elemento que pueda ser irritante: comidas, fármacos, nicotina, alcohol, etc. Se pueden administrar antiácidos, como el bicarbonato de sodio y el carbonato de calcio, que dan un rápido, pero temporal, alivio. También se administran fármacos antiulcerosos que disminuyen el contenido de ácido del estómago actuando a través de diferentes mecanismos. Los antibióticos sólo se indican cuando la causa es la bacteria Helicobacter pylori.