Rabia transmitida por murciélagos

Ante la presencia de rabia encontrada en un murciélago en la Ciudad de Buenos Aires, el Ministerio de Salud de la Nación informa a la población sobre la enfermedad en dichos mamíferos y acerca de algunas medidas de prevención.

Los murciélagos de las ciudades son insectívoros (comen insectos) y su función es controlar naturalmente las poblaciones de insectos, concentran su actividad durante la noche y de día se ocultan en taparrollos, altillos, grietas, edificios antiguos. La rabia a los murciélagos de las ciudades no les genera un comportamiento agresivo como sucede en perros y gatos, por lo tanto, no atacan a personas ni animales. Sí los murciélagos vuelan de día o se chocan con objetos, existen fuertes sospechas de que estén infectados con el virus de la rabia.

Medidas de prevención

  • Tener a estos animales alejados de la casa. Esta exclusión consiste en cerrarles el ingreso, por ejemplo, sellando la luz de los taparrollos.
  • Abstenerse, especialmente los niños, de tocar o recoger murciélagos caídos o de capturarlos, porque existe la posibilidad de que los mismos muerdan al intentar defenderse.
  • Frente a una persona mordida, comunicarse urgentemente con la Dirección de Epidemiología de la Provincia o Jurisdicción que corresponda para iniciar su tratamiento.
  • Si es posible, llevar para su análisis el cuerpo del animal que los hubiese mordido, tomando las medidas pertinentes para evitar nuevas agresiones, como colocarlos en una caja y el uso de guantes gruesos, o bien comunicarse con el municipio para su manipulación.
  • La posibilidad de contagio a mascotas es muy baja, pero vacunar anualmente a todas las mascotas es una medida de prevención efectiva.
  • Sólo se recomienda la profilaxis previa a los grupos con alto riesgo como naturalistas, personal en programas de control de rabia animal, etc.