Al hablar de la alimentación de los caballos hablaremos de una forma indirecta de la alimentación de todos los equinos, es decir de caballos, ponis, burros, mulas, etc.
Una dieta adecuada y equilibrada es uno de los elementos esenciales de los cuidados que debemos darle a estos animales.
Digestión de los caballos
Los caballos son herbívoros, pero no rumiantes. Éstos por tanto solo tienen un estómago, como los seres humanos. Sin embargo, a diferencia de nosotros, el estómago de los caballos es capaz de digerir las fibras vegetales derivadas de la hierba y del heno.
Pero a diferencia de los rumiantes la digestión de las fibras de origen vegetal no se hace a través de un estómago con diferentes cavidades, sino por una fermentación por microorganismos. Este proceso se produce en la parte del tracto digestivo llamado ciego (cæcum en latín), y conduce a la descomposición de la celulosa, el principal componente de las fibras vegetales.
Tipo de alimentación
Los caballos prefieren comer pequeñas cantidades de alimentos con regularidad durante todo el día, como lo hacen en la naturaleza de forma natural a través del pasto. Esta práctica no es compatible con la práctica actual en los establos, en los que suele alimentar a los caballos dos veces al día, pero los caballos alimentados así sufren menos problemas digestivos.
Y es que el sistema digestivo del caballo es un poco complicado. Son incapaces de regurgitar los alimentos, excepto por el esófago. En caso de exceso de comida o de envenenamiento, tampoco son capaces de vomitarla.
Además su colon es particularmente largo y complejo, con un equilibrio de la flora intestinal en el ciego que puede ser fácilmente alterado si se producen cambios bruscos en su dieta. Estos factores hacen que los cólicos equinos sean una causa de mortalidad muy elevada.
Alimentación adecuada
Por tanto una alimentación adecuada para los caballos es aquella que es limpia y de alta calidad, siempre administrada a intervalos regulares. Los caballos son susceptibles al moho y a las toxinas, por lo que nunca deben ser alimentados con materiales fermentables contaminados como el césped cortado.
Si tu caballo se alimenta con forraje ensilado ten presente que cualquier contaminación o cualquier error en el proceso de fermentación pueden causar cualquier tipo de moho o deterioración que pueden ser tóxicos para el animal.
Necesidades nutricionales
Como todos los animales, los caballos deben recibir para sobrevivir cinco clases de nutrientes: agua, energía en forma de grasas y carbohidratos, proteínas, vitaminas y oligoelementos.
Agua. Los caballos necesitan una gran cantidad de agua limpia todos los días. El agua constituye algo más del 60% del peso total de un caballo y es esencial para su vida. Los caballos pueden vivir sólo unos pocos días sin agua y se deshidratan peligrosamente cuando han perdido entre el 8 y el 10% del agua. Por tanto es importante que los caballos tengan acceso libre a agua dulce, limpia y en cantidades suficientes.
Alimentos energéticos y proteína. La fuente de alimento de la energía son las grasas y los carbohidratos. La proteína constituye un bloque muy importante para la construcción de las fibras musculares de otros tejidos.
Los caballos que siguen un proceso de entrenamiento constante, que están creciendo o las yeguas embarazadas o lactantes deben recibir más energía y una dieta enriquecida con proteínas. No obstante un caballo con una dieta demasiado rica en energía sin suficiente ejercicio puede llegar a ser demasiado movido y difícil de manejar.
Vitaminas y minerales. Un caballo con una alimentación equilibrada dispone de las suficientes vitaminas a no ser que esté sometido a un trabajo duro o a condiciones extremas.
Los minerales son necesarios para el mantenimiento y el funcionamiento del esqueleto, del sistema nervioso y de los músculos. Éstos incluyen el calcio, el fósforo, el sodio, el potasio y el cloruro. Generalmente están contenidos en la mayoría de los alimentos de calidad.
Fuente: https://caballos.mascotahogar.com/alimentacion-de-los-caballos