- La tendencia fue denominada “supermarket dating”.
- En España proponen reconocerse con un ananá boca abajo dentro del carrito.
- En Argentina, sugieren que sea un shampoo.
Ni Tinder, ni boliches, ni amigos de amigos. La última tendencia en citas se da dentro de los supermercados. La insólita situación se da actualmente en Australia y España, pero se viralizó días atrás cuando usuarios e influencers explicaron de qué se trata el “supermarket dating”. En Argentina, mientras tanto, comienzan a circular versiones locales.
Mientras que los españoles acomodan un ananá boca abajo en su carrito, los australianos lo hacen con un racimo de bananas con sus extremidades hacia arriba. Con esas frutas como señal, los falsos compradores señalan al resto de los visitantes del lugar que están en búsqueda de una relación o, al menos, de conocer a alguien para algún tipo de vínculo sexoafectivo.
El “match” se da cuando dos personas con la fruta indicada golpean suavemente un carrito contra otro: sólo entonces quedará demostrado el interés de uno por el otro.
En España, la clave es el ananá
Una enorme cantidad de videos publicados en TikTok, así como un gran número de comentarios en X (ex Twitter) dejaron en evidencia el éxito del “supermarket dating” en España. Más aún: la tendencia se da específicamente en la cadena de supermercados española Mercadona.
Clarín consultó a voceros de la cadena Mercadona sobre estas peculiares citas, quienes aclararon que no están haciendo declaraciones al respecto, ya que se trata de “un fenómeno que ha surgido de forma espontánea a través de las redes sociales”. En la misma línea sostuvieron que “no ha sido una estrategia de marketing impulsada por la empresa”.
En España, la cadena Mercadona es la elegida para el «supermarket dating». Foto ilustración Shutterstock.
Según la información que se viralizó, cada rango etario tiene su propia sección al momento de buscar pareja en el supermercado. Quienes buscan compañía de entre 19 y 25 años deben acudir a la zona de congelados. Aquellos que prefieran personas mayores de 25 tienen que acercarse a la sección pescadería. Mientras que los que opten por mayores de 40 deberán acudir a la sección vinos.
“La gente ha dejado Tinder para pasarse a ligar en Mercadona de 19 a 20”, dijo una joven entrevistada por el Diario Vasco en medio del furor de ananás. Una de las ventajas que los usuarios destacan es que dentro del carrito del supermercado se puede obtener mucha información de una persona, ya que se advierten allí sus hábitos de consumo y, con ellos, se pueden establecer coincidencias, pero también diferencias o incompatibilidades.
Otros usuarios, que no quieren participar de la búsqueda amorosa, destacan en las redes sociales que van a hacer sus compras antes de las 19 para evitar “la hora del ligue”.
De 19 a 20, en España, se popularizó «la hora del ligue» en los sueprmercados. Foto ilustración Shutterstock.
«Supermarket dating» en Argentina
Mientras que en España el lugar elegido es Mercadona, los usuarios de redes sociales en Argentina mencionan a Coto como el supermercado elegido para esta especie de Tinder entre góndolas. Hubo otros que propusieron a Farmacity. Sin embargo, la inventiva de dos influencers (y la astucia comercial de una marca) ampliaron el panorama.
Zoe Axelrud y Carolina Monclus publicaron un video en TikTok donde imitaban la tendencia que ya era un éxito en España. Lo hicieron en una sucursal de Coto, con un ananá que no recibió la respuesta que esperaban: ellas eran las únicas personas del supermercado con tal fruta como señal de disponibilidad.
Sin embargo, el contenido logró viralizarse y, tras ello, llegó la propuesta comercial. En ese contexto, el ananá fue reemplazado por una botella de shampoo.
Del ananá al shampoo, la apuesta influencer
“Hace dos meses viajé a España y en TikTok empecé a ver esta tendencia sobre gente que iba a las 7 de la tarde con una ananá al Mercadona. No lo había visto en Argentina, así que le dije a Caro: ‘Che, vamos a replicarlo acá, poniendo un supermercado que más o menos esté en todos lados’”, contó Zoe Axelrud a este medio.
Zoe tiene más de 17 mil seguidores en TikTok y más de 18 mil en Instagram, conoce bien cómo atraer al público de las redes sociales. “Si te tengo que ser honesta, yo sabía que se iba a viralizar”, admitió. Sin embargo, para ella no haber reemplazado el ananá por un producto más local fue un error. “Podría haber sido divertido argentinizarlo un poco, que fue lo que reclamaban varios de los comentarios. O muchos, que eran del interior, ponían ‘yo no tengo Coto’”, recordó.
Ese primer video, que actualmente lleva más de 531 mil vistas, dio pie a un segundo y a la aparición de una marca. Desde una agencia que representa a Plusbelle contactaron a Axelrud para una acción comercial en la que la señal en cuestión deje de ser una fruta y pase a ser un envase de shampoo de esta compañía. A la joven aún le resulta raro que no fuera otra la primera empresa en interesarse: “Debería haber sido una movida que haga un supermercado”, reflexionó.
¿Funciona el “supermarket dating” en Argentina? “No sé, pero si alguien se puso en pareja gracias a esto, para mí sería genial”, dijo la influencer.
Changomas: de la media naranja al “medio ananá”
La cadena argentina que recogió el guante para aprovechar el “supermarket dating” fue Changomas.
“Las apps de citas pasaron de moda. Así que nos unimos al reto. ¿Te sumás? ¡Te esperamos! Vení de 19 a 20 horas y encontrá mucho más que ofertas: encontrá el amor en el supermercado”, asegura la campaña que iniciaron días atrás.
«Vení a encontrar tu media naranja… o tu medio ananá”, propone Changomas. Foto ilustración Shutterstock.
“En el súper donde siempre encontrás las mejores ofertas, ahora también podés encontrar el amor: vení a encontrar tu media naranja… o tu medio ananá”, publicaron en sus redes sociales, acompañando la propuesta de los hashtags “sabemos de ofertas” y “sabemos de amor”.
La iniciativa de Changomas es “sumar una lata de ananá al changuito para mostrar que están disponibles”. Pero no sólo eso, aclararon desde el supermercado: “Si agregás alfajores, sos una persona dulce; vino, si buscás algo serio; y yerba, si querés algo casual”.
Fuente Clarin