Hubo un cruce entre Cristina Kirchner y Victoria Villarruel por Kueider, mientras su bloque, el kirchnerismo y el Gobierno se lavan las manos por el escándalo.
El senador Edgardo Kueider fue detenido en la madrugada de este miércoles en un control de rutina en el puente de La Amistad, que une Paraguay con Brasil, donde se le incautaron más de 200 mil dólares en efectivo sin declarar, lo que motorizó el pedido de expulsión por parte del interbloque peronista que responde a la expresidenta Cristina Kirchner. Horas después, confirmó que pedirá licencia mientras dure la investigación que lo involucra.
«En función de los hechos de público conocimiento, sostuvo que su determinación tiene como objetivo que no haya ningún tipo de impedimento a la hora de que se lo investigue«, remarcó su oficina de prensa en un comunicado difundido este miércoles. Asimismo, añadió: «De este modo, espera que se pongan en marcha todos los mecanismos institucionales correspondientes y que se aclaren los hechos«.
Tras el hecho, Kueider quedó demorado en un hotel de Ciudad del Este a la espera de ser indagado por el fiscal y, según especificó en declaraciones a medios locales, el dinero que llevaba no era de su propiedad. Además de dólares, el legislador tenía en la mochila 3,5 millones de guaraníes y 600 mil pesos argentinos. «Voy a dar mi versión al fiscal de turno para manifestarle mi total inocencia», declaró Kueider, senador por Entre Ríos.
La expresidenta Cristina Kirchner señaló en su cuenta de X (antes Twitter) que Kueider fue “votado como peronista” en 2019 y que luego “pasó a votar como libertario con el Gobierno de Milei”. También destacó que Villarruel lo designó en enero como presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales del Senado de la Nación.
“Así se consiguen los votos para las leyes que perjudican a las grandes mayorías y a los intereses de la Nación; o las ausencias que impiden derogar los Decretos de Necesidad y Urgencia que condenan a millones de argentinos a la pobreza o le permiten al Ministro de Economía volver a endeudar el país. Que nadie se haga el distraído… Ni la distraída”, sugirió la presidenta de PJ.
La respuesta de la vicepresidenta no se hizo esperar: sostuvo que la Justicia definirá «responsabilidades» sobre la situación de Edgardo Kueider y le pidió a la exmandataria que «deje de hacer daño y atormentar a nuestro pueblo». «Señora Jefa de la Banda, para intentar ensuciar hay que estar mínimamente limpia y usted está más sucia que una cloaca”, disparó Victoria Villarruel.
“El senador Kueider entró en su boleta, con su cara al lado y sigue siendo un afiliado del partido que usted preside», expresó desde sus redes sociales, donde adjuntó una foto de la boleta del Frente de Todos de 2019, con Alberto Fernández y Cristina Kirchner, por la que Kueider accedió a su banca.
También afirmó que «desde el Senado somos respetuosos de las leyes y del orden institucional, la Justicia dirimirá responsabilidades y le aseguro que tomaremos todas las medidas que tengamos que tomar para que se paguen los actos delictivos que se hayan cometido«. «Su tiempo pasó, deje de hacerle daño a la Argentina con su banda y tenga la mínima dignidad de dejar de atormentar a nuestro pueblo», planteó Villarruel.
Nadie se hace cargo de Kueider: su bloque, el kirchnerismo y el Gobierno se lavaron las manos
En junio de 2024, el Partido Justicialista de Entre Ríos solicitó la expulsión del entrerriano por haber votado a favor de la ley de Bases y el paquete fiscal. En septiembre, Kueider se integró al interbloque Provincias Unidas, junto con los senadores Carlos Mauricio Espínola (Corrientes), Alejandra Vigo (Córdoba), Juan Carlos Romero (Salta), Edith Terenzi (Chubut) y Lucila Crexell (Neuquén).
El espacio es presidido por Espínola, aliado principal de Kueider en el Senado y con quien integran el selecto grupo de legisladores que se hacen llamar «peronistas no kirchneristas» o «peronistas disidentes», en contraposición al interbloque de 33 senadores que lidera José Mayans.
Provincias Unidas publicó un escueto comunicado en el que sostiene que la Justicia debe resolver la situación porque «todos los funcionarios públicos de los poderes del Estado estamos obligados a someternos a la Justicia cuando lo requiera». “Manifestamos nuestra firme voluntad a favor de que la Justicia investigue los hechos hasta el esclarecimiento”, postularon.
Por su parte, el interbloque de senadores de Unión por la Patria pidió el desafuero de Kueider a través de un Proyecto de Resolución presentado durante la tarde del miércoles. La iniciativa lleva las firmas de la titular del bloque Unidad Ciudadana, Juliana di Tullio, José Mayans, y Anabel Fernández Sagasti. En el documento, llaman a la inmediata expulsión de Kueider por “inhabilidad moral sobreviniente” conforme al artículo 66 de la Constitución. En ese sentido,expresaron que “estos hechos no son aislados, sino el reflejo de una conducta sistemática basada en intereses personales y negociaciones espurias como ocurrió con la aprobación de la ley Bases”.
Sin embargo, en el Gobierno salieron rápidamente a desmarcarse del vínculo con Provincias Unidas y, principalmente, con Kueider, al advertir que «es un problema del PJ». Esa declaración fue respaldada más tarde por el presidente Javier Milei en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), donde reiteró que «lo del Kueider es un problema del kirchnerismo y se tiene que arreglar el kirchnerismo. Nosotros estamos haciendo el mejor Gobierno de la historia».
Fuente Perfil