Luego de distintos desacuerdos legislativos, el partido liderado por Mauricio Macri no ve con buenos ojos el cambio de reglas electorales. Tiene su propia iniciativa.
Después del anuncio del Gobierno del envío de un proyecto de ley al Congreso para eliminar las PASO, el PRO volvió a marcar cierta distancia con el rumbo de la administración de Javier Milei, pese a ser uno de sus aliados desde el inicio de la gestión. El desaire es uno más de los que ocurrieron en las últimas semanas.
Fuentes de la conducción amarilla en Diputados confiaron a TN que estaban al tanto de las intenciones del Ejecutivo de avanzar en ese sentido, pero la respuesta del PRO fue que “las reformas electorales llevan tiempo y es importante contar con suficiente consenso para que no sean reglas de juego que se cambien seguido”. Sucede también que los conducidos por Cristian Ritondo en Diputados tienen su propio proyecto en carpeta sobre las Primarias.
“Cuando envíen el proyecto lo vamos a analizar en profundidad como siempre hacemos y haremos las observaciones y aportes que creamos necesarias hacer. Nosotros tenemos un proyecto relativo a las PASO, para que pasen a tener un formato optativo y no obligatorio, lo cual reduciría costos, pero sin quitar esa herramienta para los partidos”, señaló otro legislador clave del partido amarillo a este medio.
También hay un malestar en el PRO porque consideran que el Gobierno no cumplió con lo acordado, de trabajar los proyectos en conjunto antes de ser enviados al Congreso. Eso se pactó en una de las reuniones en Casa Rosada de las que hasta participó el propio Milei en alguna oportunidad. Este viernes, el anuncio se hizo de manera inconsulta, según aseguraron.
“Había un compromiso del Gobierno, por orden de Milei, de coordinar agenda legislativa con nosotros. Pero al parecer no consideraron que esto fuera algo relevante”, afirmó con ironía otro referente de peso en el bloque. Y adelantó lo que puede ser su postura en el debate que viene: “Como no es sano modificar reglas institucionales como el DNU de manera inmediata, y por eso defendimos al gobierno al respecto, que el Gobierno quiera modificar las reglas electorales sin consensos, tampoco es sano”.
“No adherimos porque tenemos nuestra propia propuesta. Una reforma de este tipo lleva mucho tiempo y estamos por terminar el año. Vemos muy difícil que se pueda llevar adelante. Mientras tanto, lo de hoy fue un anuncio, después veremos los papeles”, indicaron fuentes autorizadas del bloque en Diputados a TN.
No es el PRO el único que está en contra del cambio. “Ellos lo intentaron durante el debate de la Ley Bases y fracasaron. Y ahora insisten. Pero los 12 radicales de Democracia para Siempre estamos en contra”, señalaron desde el espacio que conducen Martín Lousteau y Facundo Manes a TN. Y aclararon que nadie se va a poner a analizar este tema durante el fin de semana, porque “no hay ninguna urgencia”.
El caso es que el oficialismo no tendría las mayorías calificadas que se exigen en ambas cámaras: 129 en diputados y 37 en Senadores. “A ese número no llegan, salvo que lleguen a un acuerdo con el peronismo”, sugiere un referente de ese bloque de radicales díscolos.
El enfriamiento del vínculo PRO-LLA
Parte de ese reacomodamiento, con una impronta propia más marcada, se basa en el mayor protagonismo que ganó Mauricio Macri desde que asumió el control del PRO meses atrás. Eso le dio otro peso al partido, que venía desdibujado por tener a una funcionaria del gobierno al frente (Patricia Bullrich).
Si bien Macri remarcó en más de una ocasión -y Milei también- su vínculo personal con el Presidente, al momento de definir la relación entre los partidos fue muy cauteloso. Aún consciente de que los caminos los llevarán a estar juntos electoralmente más temprano que tarde, el fundador del PRO no quiere perder terreno en la discusión de los próximos armados de listas.
Los últimos días mostraron cierta distancia entre el Gobierno y su principal aliado. Claro que no se trata de un vínculo roto ni irrecuperable, pero sí con signos de cierto desgaste. Semanas atrás se acercaba la chance de un espacio común en el Congreso (sin llegar a interbloque) y ahora, se condicionó el respaldo al Presupuesto 2025 a la respuesta del presidente Javier Milei a los pedidos de los gobernadores.
Días atrás, Macri tuvo apariciones consecutivas, donde, de alguna manera, le marcó la cancha a Milei. “Él planteó hacer una fusión, pero hacia abajo no fluyó, por desconfianzas y pequeñeces”, señaló el expresidente este lunes en Desde el Llano, TN.
Al día siguiente redobló la apuesta en un foro junto a otros expresidentes de centroderecha y advirtió: “Si hay un solo liderazgo, el equipo es limitado”. Además, destacó el apoyo del espacio a los proyectos del oficialismo en el Congreso y reclamó que haya “un nuevo equilibrio en la convivencia”.
Fuente Tn