La brecha de ingresos entre el decil más rico de la población y el más pobre es de 14 veces. Los estratos más bajos percibieron en promedio $ 156.476.
Tras conocerse los datos de pobreza, el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) difundió los datos de distribución del ingreso para el segundo trimestre de año: los ingresos totales de la población fueron de $8.587.322 millones, un aumento del 234,6% interanual y creció la desigualdad.
El ingreso promedio per cápita fue de $289.562, muy por debajo de la Canasta Básica Total (CBT), que mide la pobreza, ascendió a $873.168 para una familia tipo en el periodo abril-junio.
Desagregado por estratos, los ingresos promedio fueron de $156.476 para los estratos más bajos, de $422.891 para los medios y de $1.133.786 para los estratos altos.
El sociólogo y director de Planificación Productiva de Fundar, Daniel Schteingart, explicó en redes sociales que “la caída más profunda se dio en el 10% más pobre (-16,8%) y en el 10% de mayores ingresos la caída fue más atenuada (-5,1%).
Por otra parte, el informe registró que el 70% de la población ocupada ganaba menos de $550.000. Dentro de este segmento poblacional, el ingreso promedio fue de $473.924.
En tanto, si se toman los ingresos por hogares el 70% de estos reunía hasta 950.000, según la misma medición. En junio, la CBT llegó a $873.168 para una pareja con dos hijos de 6 y 8 años. En tanto, el precio de la Canasta Básica Alimentaria, que mide el umbral de la indigencia, costaba $393.319 para el mismo grupo familiar.
En relación con los asalariados, se contabilizaron 9.632.592 personas con un ingreso promedio de $501.825, un importe que no alcanzó para cubrir la canasta básica. En el caso de los hogares, los ingresos laborales representaron el 78,1% de los totales, mientras que los ingresos no laborales alcanzaron el 21,9% restante. El peso de los ingresos no laborales fue mayor para los deciles del total familiar más bajos: 62,2% en el primero y 9,4% en el décimo.
“El ingreso promedio de las personas asalariadas con descuento jubilatorio fue de $638.811 (+241,6% interanual), mientras que en el caso de aquellas sin descuento jubilatorio, el ingreso promedio equivale a $253.702 (+210,4% interanual) “, señaló el Indec.
Los datos de la evolución de la distribución del ingreso del segundo trimestre se conocen una semana después del dato de pobreza, que también difundió el Indec, y mostró que el 52,9% de los argentinos se encuentra en esta situación, mientras que la indigencia afectó al 18,1%.
Más desigualdad
A su vez, los datos de distribución del ingreso marcó un crecimiento de la desigualdad para el segundo trimestre del año respecto al mismo periodo del año pasado y tras alcanzar en los primeros tres meses del 2024 un nivel récord en los últimos ocho años.
El coeficiente de Gini, que tiene como valor 1 el de mayor desigualdad del ingreso, y 0, como el de absoluta equidad, aumentó al término del segundo trimestre a 0,436 puntos, “mientras que en el mismo trimestre de 2023 el valor fue de 0,417, lo que muestra un importante aumento de la desigualdad en la comparación interanual″, apuntó el documento oficial.
En esa línea, del informe se desprende que la brecha de ingresos entre el decil más rico de la población y el más pobre es de 14 veces, el mismo nivel que hace un año. También, el 10% de la población con mayor ingreso per cápita familiar concentró 33% del total en el segundo trimestre de 2024, unas 19 veces más que el 10% con menor ingreso.
Por último, el Indec detalló que la brecha de género continuó profundizándose. Los varones ganaron más que las mujeres, $ 532.370 y $ 386.928 respectivamente.
Fuente Perfil