Biden y una entrevista que no salió como esperaba: momentos incómodos, dudas y el “Señor Todopoderoso”

Biden y una entrevista que no salió como esperaba: momentos incómodos, dudas y el “Señor Todopoderoso”

NUEVA YORK.- La entrevista de Joe Biden con el reconocido periodista George Stephanopoulos de la cadena ABC este viernes por la noche en el prime time fue una de las más importantes de su extensa carrera política. En medio de los llamados para que baje su candidatura a las elecciones de noviembre tras un debate en el que se lo vio débil frente a Donald Trump la semana pasada, Biden apostó a la entrevista como parte de sus esfuerzos para darle una nueva vida a su campaña. Pero no logró ahuyentar los temores.

La entrevista de 22 minutos se produjo ocho días después del desastroso desempeño de Biden en el debate, en el que más de 50 millones de personas observaron cómo el hombre de 81 años luchaba por completar oraciones o responder preguntas básicas sobre su campaña. Por supuesto, mucha menos gente vio la entrevista de ABC, pero entre la audiencia se encontraban muchos de los funcionarios electos, donantes y estrategas políticos que están decidiendo activamente si ayudan a rescatar (o poner fin) a la candidatura de Biden en los próximos días.

El presidente y su equipo tenían la esperanza de que esta primera entrevista ayudaría a unir a su partido y generar impulso para el largo camino por recorrer. No está claro si tuvo éxito.

“El presidente está legítimamente orgulloso de su historial. Pero está peligrosamente desconectado de las preocupaciones que la gente tiene sobre sus capacidades para avanzar y su posición en esta carrera”, juzgó en la red social X el muy influyente David Axelrod, antiguo estratega de Barack Obama y crítico de la campaña actual de Biden.

“Biden está en negación y en decadencia”, reaccionó sobre la entrevista la portavoz de Donald Trump, Karoline Leavitt, también en X, donde los republicanos afirmaron que la entrevista fue otra confirmación del estado del mandatario.

Estas son las claves de lo que sucedió en esos 22 minutos:

Más dudas sobre su estado

Biden tuvo un mejor desempeño que en el debate. También hubo destellos de fuerza cuando habló de su historial, prometió no abandonar la carrera y criticó a Donald Trump, a quien describió repetidamente como un “mentiroso patológico”. Pero necesitaba hacer mucho más que superar la vara increíblemente baja que dejó en el debate frente al expresidente republicano de 78 años. Y la entrevista de ABC tuvo varios ejemplos de pausas incómodas, palabras confusas y algunas respuestas con frases incompletas o algo inconexas que no parece que vayan a sacarlo de apuros. Si los espectadores buscaban más señales de problemas, eran fáciles de encontrar.

En una de las respuestas iniciales de la entrevista, atribuyó su mal desempeño en el debate contra Trump, durante el cual se mostró muy confundido y a veces incluso divagó, a una “mala noche” causada por un resfriado y un gran cansancio.

“Estaba enfermo, me sentía fatal”, declaró el presidente, que “no cree” en los sondeos que dan a su rival una ventaja a nivel nacional y en los estados clave. Desde su punto de vista, está “codo con codo” con Trump.

El periodista le preguntó si había visto los 90 minutos del debate. “Creo que no”, contestó Biden, en una de las frases más aprovechadas por los republicanos para volver a poner en duda su estado de salud.

Además, Biden dijo que la responsabilidad sobre su mal debate era totalmente suya. “Toda la forma en que me preparé… No es culpa de nadie más que mía”, dijo.

Su salud

Luchando por salvar su campaña de reelección, Biden rechazó someterse a una evaluación médica independiente que demostraría a los votantes que está en condiciones de completar otro mandato y respondió con algunas evasivas a las preguntas sobre sus aptitudes cognitivas.

“Mira, tengo una prueba cognitiva todos los días”, dijo Biden, refiriéndose a las tareas a las que se enfrenta diariamente en un trabajo riguroso. “Todos los días tengo pruebas”.

Insistió en que no estaba más delicado que al inicio de su mandato y que “sigue en buena forma”. Dijo que sus médicos personales le hacen una “evaluación continua” y que “no dudan” en decirle si notan algo que está mal.

“Nadie está más cualificado que yo” para ganar las elecciones, declaró el presidente demócrata de 81 años en un intento por acallar las voces que dentro de su partido le piden que se retire de la carrera electoral.

Dios Todopoderoso

El candidato demócrata todavía tiene camino que recorrer para borrar la mala impresión del debate, cuyas consecuencias inmediatas no ha sabido gestionar. Cuatro congresistas demócratas ya pidieron que Biden no se presente a su reelección y una gobernadora – Maura Healey- lo llamó a evaluar su candidatura “cuidadosamente”.

Durante la entrevista, Biden desestimó esos llamados y dijo que solo se bajaría de la contienda si se lo pidiera “el Señor Todopoderoso”.

Presionado una y otra vez por el periodista sobre si daría un paso al costado, Biden no ofreció el más mínimo indicio de que podría ceder a la presión dentro de su partido y abandonar la carrera presidencial. Se negó incluso a considerar la posibilidad y solo ofreció esa excepción: “Si el Señor Todopoderoso bajara y dijera ‘Joe, retírate de la carrera’, yo me retiraría de la carrera, pero no va a bajar”, dijo.

Incluso cuando Stephanopoulos puso sobre la mesa “el sentimiento predominante” de preocupación entre los demócratas, Biden respondió: “La gran mayoría no está donde está esa gente. (…) ¿Alguna vez ha visto un momento en el que los funcionarios electos que se postulan para un cargo no estén un poco preocupados?”.

Una entrevista difícil

Si los asesores de Biden eligieron a Stephanopoulos para la primera entrevista importante del presidente después del debate con la esperanza de que fuera amable con él, se equivocaron.

Stephanopoulos, quien trabajó como asistente del ex presidente Bill Clinton hace décadas, lanzó preguntas difíciles y verdades contundentes, aunque con un tono suave.

Cuando Biden sugirió que recientemente había atraído a grandes multitudes, el periodista replicó: “No creo que quieras jugar al juego de las multitudes. Donald Trump puede atraer grandes multitudes”.

Biden parecía nervioso por momentos.

El presidente hizo una pausa adicional cuando el periodista le preguntó si sabía “lo mal que iba” durante el debate. Más tarde, volvió a hacer una pausa cuando Stephanopoulos le preguntó si estaba actuando como Trump al “anteponer sus intereses personales al interés nacional” al permanecer en la carrera.

En otro intercambio, Biden preguntó al periodista si las encuestas son tan precisas como solían ser. Se suponía que era una pregunta retórica. Pero el entrevistador respondió rápidamente. “No lo creo, pero creo que cuando miras todos los datos de las encuestas en este momento, muestran que ciertamente está por delante en el voto popular, probablemente incluso más en los estados pendulares”, dijo Stephanopoulos sobre Trump. “Y uno de los otros factores clave que existe es que muestra que en muchos de los estados pendulares, a los demócratas que se postulan para el Senado y la Cámara de Representantes les está yendo mejor que a usted”.

Biden no hizo muchas otras preguntas retóricas.

Agencias AP y AFP

FUENTE: LA NACION