La colza -también llamada canola- es una planta herbácea perteneciente a la familia crucíferas. Tiene raíz pivotante, tallo que alcanza más de 1 metro de altura, hojas sentadas, parecidas a las de la col, y flores de color amarillo o blanco.
El fruto de la colza es una silicua que contiene semillas redondeadas, pequeñas y oscuras. Por prensados sucesivos de las semillas se extrae el aceite que tiene aplicaciones como lubricante, para iluminación y se utiliza en la industria de la elaboración de jabones.
En la década del 80, en Argentina el área que se dedicaba a esta oleaginosa tuvo un aumento explosivo. Luego de una fuerte campaña publicitaria por parte de un exportador, muchos productores se decidieron invertir en la producción de colza. Pero lamentablemente luego de dos o tres años, ese exportador perdió los mercados de compra que poseía en el extranjero, y los hombres de campo que habían comenzado a ser productores de colza, se encontraron que no podían vender las semillas producidas a ningún comprador, y menos a quien los había entusiasmado con este negocio.
En los últimos años, nuevamente surgieron los «promotores» de este cultivo. Esta vez los propios semilleros que venden la semilla de canola para la siembra, realizaron convenios con varios compradores -industrias y exportadores- para asegurarse que la totalidad de lo producido tenga buen mercado y no tener problemas en el momento de la comercialización. De esta forma lentamente, fue aumentando el área dedicada a la siembra de esta oleaginosa.
Las ventajas de la colza es que se siembra antes que el trigo -marzo, abril, mayo- y se cosecha también antes que el mencionado cereal. La colza se cosecha entre octubre y noviembre. De esta forma y por la época de cosecha se obtienen fletes mucho más baratos, ya que en esas fechas los camiones se encuentran con poco trabajo, a la espera de la cosecha de trigo. Además, la colza brinda la posibilidad de que las fábricas de aceites trabajen en una época donde generalmente están paradas, disminuyendo así la alta capacidad ociosa que caracteriza a las industrias aceiteras argentinas.
El aceite de colza en su gran mayoría se comercializa al extranjero, a pesar de que existe un consumo interno bajo, pero con una pequeña expansión, vía el embotellado y venta en envases de 1 litro en los principales supermercados de las grandes ciudades.
La zona de producción ideal es la Pampa Húmeda (La Pampa, Córdoba, Santa Fé y Buenos Aires).
ACEITE DE COLZA
Este aceite se obtiene prensando las semillas de la colza o canola. Es de textura viscosa y color pardoscuro antes de ser refinado. Se puede llegar a separar estearina sólida.
El proceso de refinado se lleva a cabo mediante un tratamiento con tierra de bataneros y posteriormente con ácido sulfúrico.
El aceite de canola tiene importantes aplicaciones como lubricante para el tratamiento térmico del acero, y en su calidad alimentaria, exenta de elementos oxidantes se emplea como emulgente en las industrias de la alimentación. Además el aceite de colza refinado se utiliza para el consumo humano, como ingrediente de las comidas y ensaladas.