- Ocurrió en un edificio de Crámer al 1900. Rodrigo Alexis Miguel (26) tenía una puñalada en el pecho.
- Un familiar contó que, tras el ataque, le envió un video en el que apuntó contra las sospechosas: eran su pareja y su madre, que quedaron detenidas.
«Mirá cómo me dejaron«. Malherido, Rodrigo Alexis Miguel (26), miembro de una familia gitana, alcanzó a enviarle un video de WhatsApp a su tío. Agonizaba en un departamento del séptimo piso en la avenida Crámer al 1900, en Belgrano.
Cuando llegaron los agentes de la Policía de la Ciudad, la víctima ya había muerto. Las dos mujeres –la pareja y la mamá de la víctima– que estaban en la escena dijeron que se había auto lesionado. Sin embargo, quedaron detenidas, sospechadas del crimen.
En principio, el llamado al 911 fue por una presunta situación de violencia de género. La denuncia la hicieron los vecinos, que escucharon los gritos de una mujer.
En el lugar, encontraron al joven con una herida en el pecho y sin signos vitales. Cuando llegó el SAME, constató que había muerto.
La pareja de la víctima, Lorena Antonella Joannu (29), según las fuentes, tenía vigente un pedido de detención por delitos contra la propiedad, librado el 6 de julio. También estaba allí la mamá de Miguel, María Isabel Iannon (73).
El edificio de Crámer 1900, escenario de la tragedia. Foto: Luciano Thieberger.
El testimonio de ambas mujeres, al ser consultadas por la Policía, coincidía en que el hombre se había auto lesionado. Sin embargo, otro relato le dio un giro al caso.
Un tío de la víctima llegó poco después al departamento de la avenida Crámer y contó que el joven, minutos antes de morir, le había enviado un video en el que denunciaba un ataque. «Mirá cómo me dejaron«, le decía mientras mostraba sus heridas.
Los rastros de sangre hallados en el lugar permitieron determinar que toda la secuencia de la muerte ocurrió dentro del departamento donde fue hallada la víctima. Los oficiales incautaron un cuchillo de cocina con mango plástico y rastros de sangre.
«Se escucharon gritos como a las 11 de la noche. Acá es normal, porque a veces pasan los chicos gritando, así que mucha bolilla no le di. A los 5 minutos me llamó una propietaria del sexto piso, pidiendo que llamara urgente al 911, porque en el edificio de al lado se estaban peleando, se estaban matando», contó Carlos, el encargado de un edificio lindero.
El hombre dijo que se escucharon «gritos desesperantes de una mujer«.
El testigo añadió que no pudo distinguir qué se decían, pero que sí se pudo ver parte de la pelea desde los edificios vecinos porque estaban con la ventana abierta. También confirmó que veía a la pareja en el barrio desde hace al menos dos años.
El Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 20 dispuso la detención de las mujeres, pidió ampliar la declaración del tío y obtener testimonios de vecinos.
Fuente Clarin