La infección del parvovirus de ganso o GPV (también conocida como enfermedad de Derzsys, hepatitis de ganso, miocarditis infecciosa o peste del ganso o ansarino) es una enfermedad contagiosa de los ansarinos y de los patitos muscovy solamente.
Distribución geográfica
La enfermedad se ha notificado en todos los principales países productores de gansos en Europa (que incluye a Hungría, Polonia, Francia, Alemania y Dinamarca), y en la antigua Unión Soviética, Israel, China, Vietnam y Japón.
Ansarino con GPV
Signos clínicos
Puede presentarse una capa necrótica en la parte interna de la boca y en la superficie de la lengua (difteria orofaríngea y lingual y formación de seudomembrana).
Las aves afectadas pueden regurgitar agua y alimento, y las plumas del cuerpo pueden estar húmedas y manchadas. Otros signos incluyen el sacudimiento de la cabeza, anorexia y debilidad, secreción óculo-nasal y encostramiento, a veces se pegan los párpados y en aves ligeramente más viejas se presenta diarrea y manchas en la cloaca.
La enfermedad es estrictamente dependiente de la edad con hasta un 100 por ciento de mortalidad en ansarinos de menos de siete días de edad y pérdidas insignificantes entre las cuatro a seis semanas de edad. La gravedad de la enfermedad en las aves neonatas va a depender de los niveles de anticuerpos derivados maternos. En las aves sobrevivientes se puede presentar enanismo y un mal emplume.
Transmisión
Las aves infectadas excretan grandes cantidades de virus en las heces, lo que resulta en una rápida diseminación de la infección por contacto directo e indirecto. Los anticuerpos pueden persistir durante varios años.
Los gansos más viejos se pueden infectar subclínicamente y establecerse una infección latente. Tales aves pueden actuar como portadores y transmitir el virus por los huevos, lo que resulta en problemas de infertilidad e incubabilidad, y en la transmisión de la infección a otros ansarinos al nacer.
Junto con otros parvovirus, el GPV es muy resistente a la inactivación química y física. No hay ninguna significancia de salud pública, y el GPV no es una enfermedad en aves de la que haya que dar parte. No se han identificado vectores biológicos.
Tratamiento y control
No existe un tratamiento específico. Los antibióticos pueden reducir las pérdidas ocasionadas por infecciones bacterianas secundarias. El control se basa en una buena bioseguridad, higiene y en la eliminación de aves portadoras.
Si se da un brote de GPV, no es recomendable retener para la reproducción a los ansarinos recuperados o que hayan estado en contacto, ya que las aves son portadoras potenciales del virus y pueden transmitirlo a través de los huevos. Los portadores sospechosos deben criarse aparte de otros gansos y patos muscovy.
En las unidades de reproducción, solamente deben incubarse juntos huevos de parvadas libres de GPV y debe mantenerse una buena higiene de la incubadora. En caso de un brote, los gansos reproductores que hayan estado en contacto que no hayan estado vacunados contra GPV deben de monitorearse serológicamente en cuanto infecciones. Debe tenerse consideración para descartar a las aves seropositivas.
Fuente: http://www.elsitioavicola.com/articles/1754/parvovirus-de-ganso#sthash.qA9I8evr.dpuf